Penchy,usted es romántico y clásico a la vez, ¿cómo enfrentar, con lo tradicional, la internacionalización del vallenato?

El vallenato está internacionalizado hace muchos años,  lo que pasa es que los artistas son los que se quieren internacionalizar, a título personal.Por ejemplo,La gota fría fue grabada en varios idiomas, es un ícono, y esa canción salió en los años 40.

Paloma San Basilio, grabó vallenato; Héctor Lavoe, también; el Gran Combo, Gilberto Santa Rosa, Julio Iglesias, Rafael. La gente habla de internacionalización, pero el vallenato ya pasó por eso.

 Penchy Castro fue un vallenato que se formó como artista en la capital, ¿qué paso cuando volvió a su tierra?

No fue fácil, porque cuando volví a Valledupar, mi tierra, era portero de fútbol y de los buenos, ¡jugaba en la Selección! Había dejado ese recuerdo, el de deportista, pero cuando vuelve Penchy Castro, el cantante (risas), mucha gente no lo asimilaba, yo cantaba, pero muy tímidamente. Soy como Julio Iglesias, que fue portero del Real Madrid, se lesionó y se convirtió en cantante.

Con los cachacos estoy muy agradecido, soy hincha de Millonarios.Me identifico mucho con Bogotá, porque le debo mucho a esta ciudad, me dio a mi esposa, a quien conocí aquí, y a mis hijos, que nacieron aquí, le debo también mi carrera, le debo mucho, llevo más de media vida en la capital. Siempre digo que soy un artista hecho por los cachacos. A veces les da rabia a los costeños y les digo:

“¡Eche, pero si somos Colombia!”.

El hecho de que su esposa, Dalia Bernal, sea directora de una importante emisora, ¿qué ha significado para su carrera?

Te digo una cosa, si inventaron pastillas para el dolor de cabeza, para la fiebre, para todo, ¿por qué no pueden crear una para la envidia?  No sé si ha sido para bien o para mal, te puedo decir que tengo dos hijos hermosos, un hogar bien bonito y en lo profesional, me siento feliz, me siento bien, no envidio lo ajeno.

Su padre,  Alfonso Castro, fue locutor y periodista, ¿qué recuerdos tiene de él?

Fue director de varias emisoras, empírico. Me atrevo a decir que Poncho Zuleta, Jorge Oñate y Diomedes Díaz, son lo que son, por mi papá, porque mi papá en esos momentos era, por decirlo de alguna manera,  la Dalia Bernal de la época. Ellos mismos lo dicen: “Nosotros le debemos un gran pedazo de nuestra carrera a Alfonso Castro”.

Usted creció a una cuadra dela plaza Alfonso López, hasta el 2003, sede del Festival de la Leyenda Vallenata, ¿cuántos artistas pasaron por su calle?

¡Uf, muchos!Por ejemplo, a Joe Arroyo, cuando estaba en Fruko y sus Tesos, lo vi caminando cuando estaba peladito. Por mi casa pasaron Luis Enrique Martínez, Juancho Polo Valencia, Máximo Móvil, Hernando Marín, Alberto Pacheco, los Hermanos López, todo el mundo pasó por mi casa. Ya ves,  o era cantante o era cantante.

Si hubiera prosperado en la administración agropecuaria, ¿dónde estaría ahora?

Creo que no hubiera prosperado, nunca me gustó estudiar, lo hacía porque tenía un compromiso moral con mi padre, con la sociedad, con mis hijos. A ti lo primero que te preguntan es:“¿oye y tú que haces?”,y yo, orgullosamente digo:“Soy artista y tengo un hobby que se llama administración agropecuaria”.

Una parte importante de su historia es la de serenatero, cuando usted llegó a la capital. Desde su experiencia,¿cuál es la canción que nunca falla?

La  Espina, de Gustavo Gutiérrez, a muchas personas salvé con esta canción. Inclusive, a mí  también.¡Con la original nos correteaban!

 “Por un beso de tu boca”,se dio a conocer…

(Canta)
Por acariciarte las manos
Yo me enfrentaría a la más dura batalla
Por un beso de tu boca le entrego mis ojos a un ciego
Quedarme sin ellos no importa porque con los tuyos veo.

¡Es un tremendo verso!Cuenta una historia. Luego llegó “Las Mariposas”.

¿Cómo llegó a su camino “Las Mariposas”?

Lleguéa Medellín a grabar con Iván Calderón.Llevaba una canción de Omar Geles, e Iván me muestra “Las Mariposas”.Quedé asombrado, pero lo disimulé muy bien,porque los compositores, para negociarla bien, dicen que es para otro cantante y la guardan. Pues me presentó otra y le mostré interés por esa. Mientras grabábamos, le dije: “Compadre, esta canción me gusta”, y la grabamos de una vez. Casi llega a Iván Villazón.

¿Y de los proyectos para finalizar el año?

Gracias a Dios estamos cerrando un año excelente,  vamos a sacar una canción que va a sonar para Navidad y carnavales, habla de una pareja que cuando sale, la mujer se antoja de todo.

Dice algo así: (canta)
¡Ay, papi, mira ese celular!, ¿me lo quieres comprar?
Cuál, yo no lo veo
Entonces ese bolso que esta allá, ¿me lo vas a regalar?            
Yo no lo veo
Amor, cuchi cuchi, corazón, ¡cómprame ese reloj!
Mmm…No, no lo veo
Entonces, cómprame un pantalón, que están en promoción                
Pague uno lleve dos, compre de cualquier color
Yo no lo veo…