Los vendedores ambulantes fueron las personas que se vieron afectadas por la película del actor norteamericano.
Will Smith, quien llegó a Cartagena para grabar una película, pagó 100 millones al gobierno de la ciudad por utilizar una de sus calles en el rodaje, entre el contrato parecía que una parte del dinero sería destinado a los vendedores que se vieron afectados por no poder trabajar, sin embargo, todo indica que estos vendedores no lograron ejercer su derecho al trabajo, y tampoco recibieron ayuda alguna por parte del gobierno.
La grabación en las calles duró 20 días, por lo que ahora estos trabajadores están esperando una colaboración.