Mónica Hernández y Amador Padilla conforman una de las parejas más estables de la farándula nacional.
La presentadora confesó cuál es la clave de su prolongado idilio: “Respetar profundamente lo que hace, el uno y el otro. Acatar los espacios, dialogar, y tener a Dios como centro de nuestra relación, es muy importante”.
“Amador es un gran compañero de vida. Es bonito sentirte a gusto, cuando llegas a casa y tienes con quién conversar y compartir. Hablamos el mismo idioma porque estamos en el medio, y somos buenos camaradas de viaje».
Mónica sacrifica los fines de semana en Bravíssimo, sin embargo, esto no es impedimento para viajar con su esposo y sus hijos a Barranquilla, Norte de Santander y el Valle del Cauca, lugar donde tiene familia. También frecuentan Miami y comparten con buenos amigos.
La pareja distribuye su tiempo y disfruta de exóticos parajes en el extranjero. “Tuvimos una inolvidable luna de miel en un hotel exclusivo para parejas, en la isla de Jamaica. Allí compartimos, juntos, momentos maravillosos y románticos”.