La dicha de viajar por el Tolima

Por: Luis Vásquez

Nada como sentir y vivir el departamento del Tolima, cuna de la agricultura, en donde no solo se siembran hortalizas, también se cosechan amor, sueños y calor humano, aquel que se siente al llegar a la ciudad capital, Ibagué. Esta ciudad es conocida no solo por el folclor y la música, sino también por su estratégica ubicación en la Cordillera Central de los Andes, entre el Cañón del Combeima, el valle del Magdalena y con cercanía al Nevado del Tolima, una posición natural privilegiada, llena de inspiración y en donde el folclor tiene su propia fiesta. Es por eso que la invitación está abierta para que visite Ibagué y sienta la maravilla de su gente, baile Sanjuanero tolimense y se tome uno que otro trago de Tapa Roja.

Siempre me he cuestionado sobre el trabajo de las agencias de viajes y de las personas que trabajan contando sus experiencias de sus recorridos en revistas, documentales, internet y en otros medios, ya que he sentido que el don de la palabra se adquiere a través de las vivencias personales, de visitar lugares y de describirlos de tal manera que el lector se interese por visitar el espacio que una persona, que generalmente no conozco, me “recomienda”. ¿Cómo lo hacen? Aunque me tomó tiempo saber el secreto, ahora lo sé y se los voy a compartir. El secreto está en describir el calor de su gente, en plasmar sensaciones a través de lo que evoca visitar un lugar.

Teniendo en cuenta lo anterior, Ibagué es el lugar perfecto para aquellas narraciones interesantes construidas a través del calor de su gente. La Ciudad Musical de Colombia, como también es conocida, cuenta con una temperatura anual que va desde los 20 grados centígrados hasta los 32, dependiendo de la época del año en la cual se visite. Ustedes podrán ver florecer el color rosado de los Ocobos, un espectáculo natural, que tapizan gran parte de la ciudad en los meses de marzo y junio, así como también conectarse con la cultura ibaguereña, a través de los sentidos, visitando los lugares más llamativos por su infraestructura y por lo que allí dentro sucede. el Teatro Tolima, el Conservatorio del Tolima, la Concha Acústica, la Plazoleta Darío Echandía, el Museo de Arte del Tolima, son espacios que convergen dentro de la historia y dan a las personas que los visitan una muestra real de las tradiciones y del estilo de vida del ibaguereño.

Por otro lado, el ecoturismo juega un papel importante dentro del desarrollo económico y social de la ciudad, ustedes pueden salir del ajetreo citadino y estar en perfecta sincronía con la naturaleza a tan solo 15 minutos del casco urbano. Visitar el corregimiento de Juntas, en el pueblo de Villarestrepo, es abrir un espacio para enamorarse de la naturaleza, para tomarse una aguapanelacon queso y para sustituir la comida rápida por un buen plato de tamal o de lechona, o, para una mejor vivencia gastronómica, por un ‘mix’ de estos platos populares característicos de la región y, como postre, dulce de leche con achiras o una deliciosa almojábana.

Otra opción, un poco más alejada, en donde se puede vivir una experiencia fuera de órbita, es visitar el Cañón del Combeima, un espacio en donde el sonido del río Combeima es la melodía más dulce y llena de sentido que se puede escuchar en el espacio. Por otro lado, este lugar es muy conocido porque es la antesala para visitar el Nevado del Tolima. Eso sí, llevar ropa cómoda y abrigada, es importante.