Es una verdadera revolución para los certámenes de belleza en el mundo, la llegada de la primera mujer transgénero a la competencia de Miss Universo.
Primero debemos entender qué significa la transexualidad. Esta se presenta cuando las personas tienen una diferenciación sexual a nivel anatómico y neurológico, es decir, la identidad de género no coincide con su manera de pensar o de sentir.
La persona transexual siente la necesidad de transformar su anatomía, desde el rostro hasta los genitales, a través de tratamientos hormonales y quirúrgicos. También se modifican comportamientos y la apariencia, lo cual tiene su origen en el síndrome de Harry Benjamín. Esta condición se presenta en una de cada 30.000 niñas y en uno de cada 100.000 hombres. El cerebro es el órgano sexual más importante y es donde se produce la condición.
Ángela Ponce se convirtió en la ganadora de Miss España, comenzó su carrera como modelo y en este campo siempre se destacó por su belleza extraordinaria. Desde los 3 años supo que estaba en el cuerpo equivocado, su vida ha transcurrido entre castings, que siempre ha pasado, pero también, por su condición, muchas veces se le han cerrado las puertas.
Para las trans, en muchas ocasiones, es muy difícil encontrar un trabajo diferente a la prostitución, donde normalmente se desempeñan y donde existe un verdadero tráfico sexual en torno a ellas. Casi que por regla general, viven en constante discriminación, así que la llegada de Ángela a Miss Universo, en caso de ser aceptada, sin duda, será un gran paso en el avance contra la exclusión.
En Colombia ya tenemos personas destacadas dentro del género, la Maja Internacional, la actriz Endry Cardeño y la youtuber Kim Zuluaga. El camino es largo para lograr una posición respetable, pero el gran paso que ha dado Ángela Ponce, como Miss España, va a romper el molde.